—Hola buenas, venía por la entrevista... —Yo soy Sergio. Y soy escritor.
Bueno, quiero decir, estoy en ello, como los alcohólicos intentando salir de su
adicción—. ¿Está Carmen?
—Carmen no está... —Empezamos mal. Este hombretón, con cierto parecido a
Marlon Brando, me dirige una mirada salvaje—. La mandé a comprar cigarrillos. ¡Ja!
—¡Ah, ya! ¿Y vos sois?
—Raúl. —El hombretón olisquea el aire. Es culpa de la caja de zapatos que
sostengo debajo de mi axila. Desprende un olor nauseabundo—. Sacá número y rajá
de acá con ese olor asqueroso.
—Oiga, Raúl, ¿pero...? Carmen me dijo que aquí me harían la entrevista de «Smoking
Dead».
—Mirá, flaco, acá solo entrevistamos a Brutos Escritores. Y por tu pinta de
putito diría que sos un fan de Erika Leonard Mitchell.
—¿Eh? Esto... es inaudito. Pero si he venido de muy lejos.
—A llorar a la iglesia.
—¡Ah, no! Esto no quedará así. ¿Sabéis que es este olor tan nauseabundo?
—Ahora sí que consigo captar su atención. Este Raúl se va a enterar—. ¡En esta
caja de zapatos llevo un papagayo muerto con una maldición aterradora! Está
hechizado por la famosa gitana Asputiota. Y si Carmen no me realiza la
entrevista dejaré aquí la caja de zapatos, con el papagayo muerto, y ya se
encargará la maldición de asolar este lugar de mierda. ¿Capicci?
Raúl se me acerca. Ya no hay más espacio entre nuestros dos cuerpos.
Detesto su aliento a tabaco. Me mira a los ojos. Huele con exagerado énfasis el
pestilente olor desprendido desde la caja y en un arrebato inesperado me la
arranca de debajo del brazo...
—¡Eh!...
—Shhh... —Ahora abre la caja. Con una mano agarra de la cola al ave reseca.
Una pluma cae al suelo. La masa de carne putrefacta parece el péndulo de un
reloj colgando en la mano de Raúl. La mece entusiasmado delante de mí. ¿Por qué
me mira con esa sonrisa estúpida en su rostro? Sin medir ninguna palabra abre
la boca y acto seguido se traga de un solo bocado al animal muerto. ¡Joder! Lo
engulle de un puto bocado. Sin masticar. Un rebuzno de pavor escapa de mi boca.
—Papi, aquí devoramos las maldiciones. Pero, ¿sabés? Es la
primera vez que me traen papagayo muerto. Olvidate de Carmen, la entrevista te
la hago yo... o no hay entrevista. ¿Capicci?
Sonrío. Una gota (es muy real), una pequeña gota de sudor salado, fría,
arquetípica y rebañada con terror, baja pleonástica por mi sien...
—Sí, capisco —Trago saliva—. Lo que tú digas, Raúl.
—¡Dale!
***
¿Qué te motivó a escribir una novela?
Saber que, a pesar de ser
costoso, podría hacerlo.
¿Por qué hay que comprar y leer Smoking dead?
Hay que comprarla si a uno le
gusta el humor absurdo, irreal y loco. Si no, entonces es mejor mantener a
salvo la mente de esta gran fumada que supone Smoking Dead. ^^
¿Cómo surgió la idea?
Inicialmente no tenía ninguna
intención de escribir una novela. Todo empezó hace años, en un bar, estábamos
tomando unos cafés, mi hermano y yo, y él, siempre tan gracioso, tuvo una
hilarante ocurrencia acerca de la fusión de estilos entre fumadores y muertos
vivientes. “Dameee fuegooo...”, escenificando la escena, e incluso inventándose
una pequeña situación cómica. Me gustó tanto la idea, que escribí dos páginas,
semanas después escribí diez páginas más, y... después de casi cuatro años, con
tantas situaciones recopiladas, supongo que mi opera prima decidió nacer por sí
sola.
En la obra hay múltiples guiños a series de televisión, a documentales y a
películas que hoy son grandes clásicos. ¿Son tu fuente de inspiración o es la
forma de presentarnos tus gustos personales?
Un poco de ambas cosas. El
cine, el teatro, la literatura me marcan profundamente, vivo muy intensamente
cualquier arte audiovisual, así que gusto e inspiración se fusionan en mi caso.
Además, algunos capítulos de la novela están escritos a modo de homenaje hacía
actores que marcaron etapas de mi vida.
Hay en Smoking…, detrás de toda la ironía, el absurdo y el
humor, una crítica a la sociedad actual y a las políticas que la rigen. ¿Es tu
idea dejar un mensaje en el lector, o escribís solo para entretener?
Sinceramente, muchas personas
me han comentado esta misma cuestión, pero mi idea nunca fue hacer una crítica
de la sociedad, ni siquiera se me pasó por la cabeza, y mucho menos de forma
elaborada. Tan solo quería que la gente sonriera.
¿Por qué elegiste Amazon para publicar tu libro?
Ufff... está pregunta requeriría
al menos cuatro o más páginas para ser contestada. Ja, ja, ja, y como no deseo
dormir a nadie con mis «explayaciones», a modo de resumen diré, que el parto de
mi opera prima es algo que quería hacer por mí solo, sin intermediarios de
ninguna clase. Me lo planteé como un reto.
¿Qué expectativas tenés? ¿Funciona cómo esperabas?
Como buen novato ilusionado,
mis expectativas nacieron demasiado altas, esperaba llegar a cien o doscientos
lectores. Recientemente he llegado la cincuentena, sin embargo, he leído que a
largo plazo siempre hay posibilidades de aumentar el número de lectores... En
todo caso, al no haber intermediarios de por medio, he podido ofrecer el libro
a un precio razonable. Por lo pronto, ya tengo empezada la segunda novela (que
no tiene nada que ver con Smoking), y seguiré promocionando Smoking Dead en las
redes sociales. Si se tiene la posibilidad de tener el respaldo de una buena
editorial, es genial contar con ese apoyo, del mismo modo, creo que nadie tiene
el derecho a arrebatarte la ilusión de escribir y mucho menos decirte que no
tienes la calidad literaria para publicar. El arte no se puede medir en
términos cuantificativos, no es ciencia. Lo que hoy es basura, mañana es un
clásico. La autopublicación es una alternativa a la hora de publicar que no
descartaría en ningún caso.
¿Cuándo comenzaste a escribir historias?
Cuando era joven, escribía
módulos de rol de un juego llamado Aquelarre, eran pequeñas historias que
necesitaban de una documentación histórica previa. Creo que ahí empezó a
forjarse mi narrativa básica. Después de muchos años, creé un pequeño blog, Un
tranquilo lugar de aquiescencia, en el que llevo siete años.
¿Recordás el primer cuento que hiciste?
No era un cuento, era poesía.
Recuerdo vagamente que debía tener entre ocho y diez años, y en mi colegio, con
motivo de una festividad denominada «Sant Jordi», el día de la rosa y el libro,
debíamos escribir una poesía en clase. Entregué la hoja a mi profesora, y
recuerdo que la profesora me preguntó, «Sergio, ¿has copiado este texto de
algún sitio?». Quizá mis recuerdos me engañen, pero creo que pensó que estaba
demasiado bien escrito para un niño de diez años, en todo caso, no conservo
aquel escrito, y tan solo recuerdo que trataba sobre un caballo volador que
corría por encima de las nubes.
Hace años que presentás tus
escritos en tu blog Un tranquilo lugar de aquiescencia. Contanos de
tu sitio y de las ramas de tu personalidad que lo administran, como UTLA, NUTLA, IGNATIUS. B. P. y
FELI NORBULINGKA.
SERGIO B. PONCE, NUTLA,
IGNATIUS. B. P., UTLA
y FELI NORBULINGKA
Algún día narraré largo y
tendido por que decidí escoger esa palabra tan extraña, Aquiescencia, para que
formara parte del título del blog. Es una anécdota simple que me gustaría
explicar con más detalle en otro momento. El blog es un lugar liberador,
mágico, que me ha permitido conocer a gente increíblemente buena, en esto del
arte del escribir, sobre todo gracias a El Edén De Los Novelistas Brutos, y no
solo escritores, sino también a excelentes ilustradores. Aturde pensar en la
cantidad de buenos artistas que existen en este mundo que no pueden ganarse la
vida trabajando de su pasión.
Acerca de mis ramas... Si
dijera todo lo que pienso acerca de mis amigos UTLA, Feli, NUTLA e Ignatius,
seguramente me acabarían encerrando en un «psicomaníaco». Aunque, como hoy en
día está muy en boga esto de las realidades alternativas y la teoría de
cuerdas, con sus múltiples universos y todo eso y mucho más... Tan solo
añadiré, que, sin todos ellos, yo no sería yo. Les estoy muy agradecido.
¿Qué relato publicado en Un tranquilo… es el que más te
gusta?
Tengo varios: «Engatuzada y el
señor Tortugo», «Los cuatro pretendientes», «Los vampiros sobre ruedas», «Mi
mamá me dice que soy espacial», ... Al final, son todos como hijos, y es muy
difícil escoger a uno solo.
¿Encontraste una sincera aquiescencia de parte de los
lectores de Smoking dead?
Sí, mucha aquiescencia, he
recibido buenas y cariñosas críticas. Incluso fotos de errores de la primera
edición, que he anotado celosamente, para futuras correcciones. Es maravilloso
ese feedback entre lector-escritor. Y he descubierto facetas de mi propia
novela que yo no había contemplado. Es un mundo mágico el que me ha abierto la
novela.
¿Tenés algún hábito al momento de la escritura?
No sabría decir... Cualquier
lugar y cualquier hora son buenos para escribir. Antaño, en el móvil (celular),
escribía bastante, sobre todo en mis trayectos en tren, aunque últimamente
también me da por darle al teclado del PC. El arte de escribir, es como el arte
de amar, todo es empezar. ^^
¿Accederías a cambiar el destino que le diste a un personaje por exigencia
de tu editor porque él opina que es eso lo que el lector querría y no lo que
vos escribiste? ¿Pensás en el lector a la hora de escribir?
Sí y no. Me explico. Si es lo
que el editor querría por ser más comercial no cambiaría ni un ápice. Yo no
escribo para un público ni para un editor, los personajes están pululando
alrededor de mí, y tienen su propia voz, y necesitan narrarla como desean. Otro
motivo muy distinto sería que mi editor señalara un comportamiento extraño (anormal)
en un personaje que antes no estaba, o una situación incoherente con la forma
de actuar del personaje y que no tuviera lógica alguna dentro del arco
argumental o de la propia personalidad del personaje, eso sería distinto,
entonces sí cambiaría lo que hiciera falta.
En el lector pienso sobre todo
a la hora de la maquetación, es decir, en facilitarle la lectura: para mí, la
literatura no debería ser una carrera de obstáculos, una buena elección
tipográfica, espacios amplios, capítulos no excesivamente largos, márgenes
cómodos... Y en cuanto al contenido de la novela... Es imposible gustar a todo
el mundo, así que solo intento ser yo mismo.
¿Quiénes son tus autores preferidos?
Me encanta esta pregunta. ^^
Ana María Matute, Michael Ende, Tolkien, Stephen King, Alejandro Dumas (padre e
hijo), Murakami, Miguel Delibes... qué lástima, me voy a dejar tantos.
¿Tus novelas predilectas son…?
Hay tres en especial, aunque
seguro me olvido de otras de las que después me arrepentiré: «Olvidado Rey
Gudú» de Ana María Matute, «El maravilloso viaje de Nils Holgersson» de Selma
Lagerlöf y «La historia interminable» de Michael Ende.
¿El libro qué menos te haya gustado?
Ja, ja, ja. Está pregunta
también me encanta. No hay libros malos, si no malas personas... ja, ja, ja.
Sobre esta cuestión he tenido trifulcas hasta altas horas de la noche. En todo
caso, «haber... los ahílos», pero no saldrá de mi boca una crítica hacía ningún
libro.
Contanos de tus sueños o deseos.
Realizar una recopilación de
relatos del blog. Acabar mi segunda novela, y antes de morir, escribir al menos
diez libros. Y de entre ellos, conseguir escribir al menos uno, que realmente
consiguiera emocionarme. Por soñar...
Escribiste un gran relato llamado «Carta a mi yo del pasado». ¿Qué te
dirías en una misiva?
Muchas gracias por nombrarlo
gran relato, no me lo merezco. La verdad es que sería escueto: «Hazte caso, no
pares, sigue adelante». Eso escribiría, y si pudiera ver el futuro, no querría
verlo, prefiero vivir el día a día, sin desvelos.
Tus frases de cabecera son «Cierra tus ojos, encuéntrate y sigue para
adelante. Buena Suerte» y «Solo existe el amor», pero también lo es «La
negatividad os hará libres». ¿Aplicás un poco de todo esto en tu vida personal?
Supongo que tanto las frases
de UTLA, como la de su hermano NUTLA, me persiguen constantemente en mi
cotidianidad. Las personas somos ambiguas, un día somos capaces de la mayor
heroicidad y al siguiente de la mayor atrocidad. Sin llevar al extremo la
anterior afirmación, diré que sí, qué en mi vulgar vida, esas frases poseen una
significancia especial.
¿Podés contarnos alguna de las ideas que rondan en tu cabeza que puedan ver
la luz en una futura obra?
Diré dos palabras de
inmediato: Ciencia ficción y Robots. ^^ Del resto de pensamientos perturbadores
que rondan por mi cabeza, de momento solo son borradores, de los que me
encariño con el tiempo o los relego a un segundo plano.
Algo que todos nos preguntamos: ¿Quién es Sergio Bonavida Ponce?
Creo que esta es la pregunta
más complicada que me han hecho en los últimos años. Pues con temor de fallar
en la respuesta, creo que soy todo yo. Ja, ja, ja. Un simple humano con más
obstinación que talento.
Terminá la entrevista con lo que tengas ganas de decir o contar.
Agradecer con todo mi cariño
la dedicación que puso Genoveva Gutiérrez Ruiz a la revisión y
corrección de Smoking Dead, sin ella, los fallos ortográficos y gramaticales se
hubieran contando a miles, y si algo merece ser hecho, merece ser hecho bien.
Gracias Genoveva.
Mostrar mi aprecio a dos
ilustradoras que siempre han estado prestándome su arte durante estos años: Marina
Umi y #TheAmazingRita (AKA Ritixart).
A mi gran amigo Henry
Slim, por ser el mejor músico que conozco, y crear la banda sonora de UTLA.
Para terminar tengo ganas de
realizar una importante pregunta: ¿Cuándo podremos leer la excelente novela «Opopónaco»,
ya sea publicada en Amazon o en la plataforma que sea? Deseo una pronta
respuesta. ^^
Agradecer esta entrevista, no
me la esperaba, y me ha emocionado. Sobre todo, gracias a Raúl Omar por ser
siempre una referencia y unirnos a todos en este oficio del escribir. Gracias,
gracias y gracias por realizarme la entrevista, de verdad. Lo más maravilloso
de escribir, es la cantidad de personas que encuentras en el camino.
Abrazos... y parafraseando a
UTLA: «Solo existe el amor».
***
Sergio Bonavida Ponce
nació en 1977 en la bonita ciudad de Barcelona a orillas del mar mediterráneo.
Realizó sus estudios en dicha localidad, los cuales alternó con clases de piano
y órgano durante cinco años. Pero su mente no estaba hecha para la composición musical
y su necesidad de ser creativo le impulsó a abandonar ese arte. Más tarde
ingresó en un club de rol, sin saberlo, comenzaba así su afán literario. Inventaba
leyendas para ambientar las partidas, creaba extensas biografías de personajes e
inició documentaciones detalladas de la vida en la edad media. Años más tarde,
abandonado el club, inició un proyecto con UTLA, Feli y NUTLA: «Un tranquilo
lugar de aquiescencia». Un blog que trató inicialmente sobre temas dispares: películas,
novelas, relatos. Aunque, dos años después, el blog se consolidó como una fuente
narrativa y se dedicó en exclusiva a la producción de relatos. Durante siete
años, cada domingo se publicaba un relato. En ese período se unió a la página
de Facebook, «El Edén De Los Novelistas Brutos», donde conoció a infinidad de escritores.
Esta unión le permitió mejorar su técnica, aprender de las críticas de los
compañeros y estudiar las recomendaciones que surgieron a raíz de tan mágico entorno
literario. En 2015 recibió clases presenciales en el taller literario «Aula de
escritores» del barrio de Gracia, y en el mismo año se apuntó online a un curso «Corrección, estilo y
variaciones de la lengua española» impartido por el profesor Santiago Alcoba de
la UAB. En 2016, como autor independiente en la plataforma Amazon, publicó su
primera novela, «Smoking Dead».
Para obtener la novela «Smoking dead», hacé clic en el siguiente enlace: Un tranquilo lugar de aquiescencia.
;-> ououou Lágrimas de cariño y de ilusión.
ResponderEliminarGracias Brutos compañeros.
Bravo Sergio!!! El futuro está contigo. Lo sé.
ResponderEliminarY en ti también. ^^
EliminarAbrazos y gracias por pasar por el edén.
hola raul!muy, muy buena entrevista!! te compartimos, saludosbuhos.
ResponderEliminarqueridos buhos. ¿vosotros también por aquí? que bueno veros.
EliminarAbrazos, como dice UTLA, ululantes saludos. ;->
Toda una vida, relatada y delatada. Toda la esperanza en aquiescencia, el amor, y la humanísma versavice. Con cariño.
ResponderEliminarHola Tierra,
Eliminar¿versavice? y dice que no aprendo nada de usted.
Ahora con latinajos viceverseados. ^^
Muchas gracias por las palabras.
Un abrazo muy grande.